17 de junio de 2020

Trucos de la abuela para unos sanitarios relucientes

Restos de jabón, de cal, manchas de óxido o amarillentas… Con el uso y el paso del tiempo, los sanitarios de nuestros baños pueden perder el lustre y el brillo que tenían cuando eran nuevos. 

A veces no es suficiente la limpieza diaria y hay que incidir un poquito más para devolverles la belleza original. Por supuesto, puedes utilizar productos específicos, pero si prefieres soluciones más naturales e igual de efectivas, nada como echar mano la sabiduría de nuestras abuelas, que con algo tan simple como vinagre, limón, bicarbonato o agua oxigenada hacían maravillas. ¡Toma nota! 

  1. Sanitarios brillantes

Empezamos por lo más sencillo. Si el único problema de los sanitarios es que tienen una superficie apagada, pasa primero un paño humedecido en agua templada con limón y déjalo actuar un poco para que arranque los restos de suciedad. Luego debes aclarar y pasar una bayeta humedecida en vinagre blanco caliente. Frota con un paño seco que no suelte pelusa ¡y ya está! Verás como tus sanitarios relucen de nuevo.

  1. Quitar manchas y blanquear

El agua oxigenada es perfecta para eliminar pequeñas manchas de grasa. Solo hay que pasar una esponja por la zona y dejar actuar unos minutos antes de aclarar. ¿La mancha se resiste? Entonces frota con suavidad con una pasta hecha con media taza de bicarbonato y dos cucharadas de agua oxigenada. Si añades zumo de limón, además de arrancar la mancha, el sanitario quedará más blanco.

Si se trata de una mancha oscura alrededor del desagüe, frotar con bicarbonato será suficiente. Mientras, con el vinagre eliminarás restos de jabón y frotando medio limón espolvoreado con sal conseguirás eliminar las manchas de óxido

En caso de manchas amarillentas o resistentes, puedes probar con una mezcla de media taza de trementina con dos cucharadas de sal. Empapa un paño con esta la pasta y frota con cuidado, deja actuar unos minutos y aclara con abundante agua caliente. ¡Infalible! 

  1. Eliminar la cal

La cal se acumula, se endurece y hace que los sanitarios ofrezcan un aspecto envejecido y poco higiénico. El consejo es limpiar en profundidad con cierta frecuencia para evitar que se formen depósitos. ¿Qué harían nuestras abuelas para eliminarlos? Puedes emplear tres mezclas diferentes, según lo que tengas a mano:

  • Bicarbonato sódico y vinagre blanco a partes iguales.
  • Medio vaso de vinagre blanco y el zumo de un limón.
  • Media taza de bicarbonato sódico y 2 cucharadas de agua oxigenada.

En cualquiera de los casos, solo tienes que dejar actuar la mezcla durante unos minutos, frotar con cuidado, aclarar y pasar luego un paso suave que no deje pelusas. 

Y un truquito más, si son los grifos los que tienen depósitos de cal, echa un poco de cualquiera de las mezclas en una bolsita y átala a la boquilla para que se empape bien. Luego solo tendrás que pasar un cepillo y verás como el agua vuelve a salir sin problemas.

Algunos trucos más

Ya ves que tener unos sanitarios impolutos no es complicado y lo puedes conseguir con productos que seguramente tienes en casa. Además, algunos de ellos como el vinagre o el agua oxigenada son desinfectantes, por lo que son perfectos para el baño. 

¿Pero qué más nos dirían nuestras abuelas? Que usemos cepillos para llegar a todos los rincones (juntas de sumideros, interior de inodoros, etc.), que no utilicemos los mismos trapos para todos los sanitarios, que el papel de cocina para secar y sacar brillo es perfecto y que, por supuesto, probemos en una zona oculta antes de aplicar cualquier mezcla para limpiar los sanitarios. 

Fuente: habitissimo