El Agua Caliente Sanitaria (ACS) es el agua destinada a consumo humano que se calienta para su uso. Sus usos son muy diversos, aunque la mayoría de consumo de este tipo de agua se realiza en el baño.
Existen muchos tipos de fuentes de energía para producir este tipo de agua. Si bien las más usadas son el gas natural y la electricidad que provienen de las Red Española, lo cierto es que se están empezando a instalar sistemas de energía renovable a nivel de vivienda para producir agua caliente.
Fuentes de energía tradicionales y renovables
Como hemos dicho, existen varias fuentes de energía para producir Agua Caliente Sanitaria a nivel de vivienda. Este tipo de energías se puede dividir en dos grandes grupos:
Fuentes de energía tradicionales
- Gas: A nivel de vivienda, las calderas de gas pueden funcionar con gas natural, butano o propano. Lo más común suele ser el gas natural, pero el hecho de que no en toda España se disponga de él hace que aún se utilicen bombonas de butano o propano o instalaciones de propano canalizado o a granel.
- Gasóleo: Consiste en una mezcla de hidrocarburos. Se suele usar en viviendas unifamiliares donde no se dispone de suministro de gas natural, aunque es muy caro.
- Electricidad: En este caso nos referimos a los sistemas eléctricos que se nutren de la electricidad de la Red Española de Electricidad. Lo cierto es que, pese a que existen tarifas de energía verde, este tipo de energía no es muy limpia.
Fuentes de energía renovables
- Energía solar: Es la más desarrollada a nivel de vivienda y la única que permite el autoconsumo. Si no quisiéramos llegar a esto, podríamos conseguir el 70% del ACS mediante placas solares.
- Energía eólica: A nivel teórico, la energía eólica permite el autoconsumo, aunque su aplicación a nivel de vivienda aún no está muy desarrollada. Lo que sí se ha desarrollado es la aerotermia.
- Biomasa: Este tipo de calderas se está poniendo cada vez más de moda. Son calderas que emplean productos que provienen de materias primas, destacando el pellet.
Aerotermia
Es un tipo de sistemas que se nutre del calor existente en el aire para transferirlo al ambiente o al agua. Se pueden emplear para climatización y Agua Caliente Sanitaria durante
todo el año.
Funcionan mediantes bombas de calor con tecnología inverter y sólo requieren de la electricidad necesaria para que el motor del compresor funcione, por lo que reducen el consumo de energía para ACS en más de un 70%.
Ventajas
- Podemos obtener todo el ACS necesaria para el consumo con este tipo de sistemas.
- Instalación sencilla.
- Es un buen sistema para obra nueva o reforma, puesto que se pueden adaptar a ella sistemas ya presentes.
- Su eficiencia energética y su rendimiento es muy elevado. Por cada kilovatio que consume, puede llegar a producir cuatro kilovatios.
Inconvenientes
Su rendimiento depende de la temperatura exterior. Si hay mucha diferencia, una parte de la energía producida se destinará a calentar el propio sistema, reduciendo el rendimiento.
Su instalación es costosa y suele requerir de adaptaciones de la instalación eléctrica existente, como puede ser una subida de potencia. Su contaminación acústica es mayor que la de las placas solares.
Energía solar
En este caso nos aprovechamos de la energía solar térmica. Mediante captadores solares térmicos o placas solares se aprovecha la energía de la radiación solar y se transforma en energía térmica.
Un sistema de placas solares se divide en tres sistemas:
- Sistema de captación: Son las placas solares que captan la energía solar.
- Subsistema de acumulación: formado por depósitos de agua caliente. Un acumulador es el encargado de adaptar la energía disponible a la que se requiere.
- Subsistema de distribución: consta de un equipo de regulación, tuberías, bombas, elementos de seguridad… que lleva el ACS allí donde se va a consumir.
Ventajas
- Permite el autoconsumo, por lo que pasaría a ser una energía gratuita
- No genera contaminación acústica
- Es una energía renovable no contaminante
- Termina con la dependencia de los combustibles fósiles
- Se puede combinar con otros sistemas (como la aertoermia)
Inconvenientes
- Si no vivimos en un lugar de mucho sol, puede que no podamos auto abastecernos.
- Dependencia de la cantidad de horas de sol
- Es difícil encontrar un lugar para instalarlas
- Si bien su mantenimiento no es complicado, un mal mantenimiento puede producir problemas graves en la instalación
